Javier Fernández
La caza es uno de los motores económicos de la España rural. Se cifra que la actividad cinegética genera al año 6.475 millones de euros, lo que representa el 0,3 por ciento del PIB anual de España, y supone 186758 puestos de trabajo.
Rehaleros, guardas rurales y de caza, arrieros, guías, carniceros, hosteleros o veterinarios entre otros colectivos se ven beneficiados económicamente cada vez que se celebra una montería en España. Salvador Canto González gestor gaditano nos muestra el número de profesionales implicados en el desarrollo de la montería celebrada este domingo en San José del Valle.
Jabalíes cazados en montería.
El informe "Impacto Económico y Social de la Caza en España" elaborado en el año 2018 por Deloitte para Fundación Artemisan refleja que la actividad cinegética representa el 0,3% del PIB, que equivale al 13% del sector agrícola, ganadero y pesquero, al 4% del sector de la construcción o al 9% del sector financiero. La montería española genera cada fin de semana miles de puestos de trabajo.
Gestión realizada entes de la montería.
Asistimos a una de estas monterías, con más de 80 puestos de trabajo directos
Un ejemplo de ello es la cacería celebrada este domingo en la mancha del Hatillo y la Cabrilla organizada por Cinegética el Acebuchal y Cinegética Manilva. Para el desarrollo de la montería fueron necesarios 20 rehaleros junto a sus respectivos ayudantes, 4 secretarios,9 postores, 12 batidores y guías que dirigían a los rehaleros, 2 guardas de caza y 4 arrieros.
Un ejemplo de ello es la cacería celebrada este domingo en la mancha del Hatillo y la Cabrilla organizada por Cinegética el Acebuchal y Cinegética Manilva. Para el desarrollo de la montería fueron necesarios 20 rehaleros junto a sus respectivos ayudantes, 4 secretarios,9 postores, 12 batidores y guías que dirigían a los rehaleros, 2 guardas de caza y 4 arrieros.
Arrieros sacan del monte los jabalíes tras culminar la montería.
Una vez finalizada la cacería se necesitó la intervención de 5 carniceros, un conductor de un camión frigorífico,1 ayudante para retirar los despojos de las reses, un veterinario, 2 cocineros y 4 camareros más el personal del hotel en el que se hospedaron los monteros. A este número de jornales hay que añadir el del personal necesario para el desbroce de cortaderos.
Más de 80 puestos de trabajo se han generado de manera directa el día de la celebración de la montería. A estos hay que sumar los indirectos. Estos números demuestran la importancia de la caza en la economía rural.
Se batieron las manchas del Hatillo y la Cabrilla en el término municipal gaditano de San José del Valle con 20 rehalas. Los 42 monteros participantes fueron situados en armadas de cierre y traviesas. Se contabilizaron según la orgánica 199 disparos. Una vez finalizada la montería el plantel de reses abatidas era de 10 venados machos, 26 ciervas y 25 cochinos.
Según la orgánica la cuantía de jabalíes cazados no reflejan el número de cochinos existentes en la mancha. El fuerte viento y la importante población de cervuno impidieron el desencame de gran parte de los cochinos que habitaban en la mancha.
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