Tras la resolución publicada por la Consejería permitiendo a los cazadores la entra y salida del territorio de la comunidad para ejercer la actividad cinegética, los animalistas emprenden la vía legal.
Podría decirse que se trata de algo previsible, ya que el fervor animalista no ha hecho sino aumentar en los últimos años que, además, se han caracterizado por el uso de la vía judicial de estos para atacar con todas las armas posibles la cinegética. Recientemente, se publicaba en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha la resolución oficial por la que se declara la caza “una actividad necesaria” y se permiten los desplazamientos para la entrada y salida de la comunidad a cazadores.
Hace escasas horas, hemos conocido que la asociación Proanimal ha presentado un recurso de alzada contra la resolución de la Consejería, solicitando su “inmediata paralización cautelar”, alegando que “el derecho a cazar no debe estar por encima del derecho a la vida humana”. Además insistían en que “vulnera derechos fundamentales como la vida y la integridad física de las personas”.
Cargaban las tintas también contra José Luis Escudero, consejero de Desarrollo Sostenible y contra Félix Romero, director general de Medio Natural y Biodiversidad que firmó la resolución, alegando “falta de competencia” por parte de ambos. Del director general aseguraban que mediante dicha resolución, “se quita definitivamente la careta”, para mostrar “la cruda realidad de lo que la Consejería de Desarrollo Sostenible es: un mero eufemismo para promover la protección de la caza por encima de todas las cosas”.
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